Las grandes epidemias de la historia

En estos tiempos de confinamiento por la crisis sanitaria del coronavirus, cuando estamos viviendo con pavor las consecuencias, hablamos de las otras grandes epidemias de la historia.

Recientemente un meme ha corrido como la pólvora por las redes sociales. En él se viene a decir que las pandemias se ajustan a un patrón y suceden cada cien años: la peste negra en 1720, el cólera en 1820, la gripe española en 1920 y ahora el coronavirus. Pero no es tan sencillo, como veremos a continuación.

La peste negra no se originó en el año 1720 como dice la imagen. Los primeros brotes de esta epidemia se dieron entre los años 1348 y 1350. Es decir, pasaron 400 años antes de lo que se muestra en la imagen.

El cólera ha causado siete pandemias diferentes desde el año 1817. La séptima oleada de la pandemia se originó en Indonesia en el 1961. Por lo tanto, tampoco se originó en el año 1820, como indica el citado meme. Se dio en 1817 y se ha ido replicando.

La pandemia de la gripe de 1918, llamada coloquialmente «gripe española», se originó en el año 1918, no en 1920.

La peste negra, la gran epidemia medieval

Hablamos primero de la peste negra. Nos situamos en la Edad Media hacia mediados del siglo XIV. Un tercio de la población europea de aquella época murió por la peste negra.

En total fallecieron 100 millones de personas en todas las zonas en que afectó (se libraron América, el África subsahariana y Oceanía), lo que suponía un 20% de la población de la época.

La peste negra se cebó con toda la población, sin distinguir clases sociales, como demuestra el hecho de que muchos reyes y reinas perecieron, según las teorías más certeras, por su causa.

No se sabe con certeza dónde empezó la enfermedad ni cómo llegó a Europa, aunque la teoría más aceptada señala al centro de Asia. Pudo desarrollarse al norte de la India, en las famosas estepas del centro del continente y el desierto de Gobi.

En Crimea había una colonia genovesa, Caffa, de donde los habitantes huyeron en barco cuando llegaron los mongoles. En esa huida llevaron consigo la peste, que alcanzó el puerto de la ciudad italiana en 1347.

Tampoco está claro qué originó la enfermedad. Primero se culpó a los judíos y, de hecho, fue la peste la culpable de que años más tarde acabaran siendo expulsados de muchos países de Europa, además de toda la ola de violencia que se cernió sobre ellos por parte de una población que necesitaba encontrar un culpable. Alguien tenía que pagar.

Con el tiempo se pasó de los judíos a las ratas. Más tarde se pensó que no eran las ratas, sino las pulgas que venían con ellas. Esta es la teoría que sigue estudiándose hoy. Sin embargo, recientes estudios de la Universidad de Oslo y de Ferrara han abierto otras dos posibilidades.

Además del odio que hizo crecer contra la comunidad judía, quizá la consecuencia más importante de la peste fue la parálisis que produjo en la floreciente cultura europea de la Baja Edad Media. Hay quien asegura que, de no haber sido por ella, el Renacimiento se hubiera adelantado un siglo.

El cólera: la gran epidemia del XIX

Tras la desolación bajomedieval que dejó tras de sí la peste negra, pasamos a hablar del cólera. Tuvo lugar en el siglo XIX y prácticamente todo el planeta se vio sacudido por otra de las grandes pandemias de la Humanidad.

Ya existían sistemas de cuarentena, pero, como hoy, no todos estaban de acuerdo con su aplicación. El mundo empezaba a globalizarse y las transacciones comerciales internacionales movían enormes cantidades de dinero. La gran mejoría en las comunicaciones, gracias, sobre todo, al ferrocarril, hicieron que la bacteria pudiera propagarse con más velocidad.

Víctima del cólera en Sunderland (Reino Unido) en 1832.

Parece casi seguro que el origen de esta enfermedad está en la India. Particularmente, en el río Ganges, en la ciudad de Benarés. Es la gran ciudad sagrada del hinduismo y es famosa por sus ritos sagrados de defunción, en los que los ricos incineran a los muertos, pero los pobres, simplemente, los echan al agua.

Las orillas del Ganges en Benarés, en India.
Las orillas del Ganges en Benarés, en India.

El cólera es una enfermedad infecciosa producida por la banteria Vibrio Cholerae. Esta bacteria es muy común en zonas donde hay agua no potable y malas condiciones higiénicas.

El agua es, de hecho, su principal fuente de contagio, aunque también puede transmitirse entre personas. Produce unas fuertes diarreas que, en casos avanzados, pueden llegar a matar a una persona en cuestión de horas.

Tradicionalmente se han contado seis grandes epidemias de cólera, aunque ha habido más. De hecho, sigue siendo endémica en algunas zonas del planeta con escaso acceso a fuentes de agua potable y malas condiciones higiénicas, principalmente en el África subsahariana.

Fueron en 1817, 1829, 1852, 1863, 1881-1896 y 1899-1923. En este tiempo, prácticamente todo el siglo XIX, murieron millones de personas. Solo en España se calcula que murieron más de 300.000 personas por causa directa del cólera.

Un hecho muy interesante de las pandemias del cólera es algo que estamos viendo muy a menudo estos días: provocó el nacimiento de la cooperación médica internacional.

A mediados del siglo XIX, y hasta finales, hubo una explosión de encuentros médicos, la mayoría de ellos centrados en cómo contener, tratar y frenar el cólera. Situación muy parecida a la que estamos presenciando en estos tiempos.

Esa cooperación internacional sin duda es muy clara en esta epidemia. Todo el mundo trata de perseguir la manera de contener la pandemia, la vacuna. De dar a conocer cómo funciona, de entender mejor al enemigo a batir.

La gripe española: la pandemia más mortal

Llegamos así hasta la epidemia más reciente, la gripe española. Se desató durante la Primera Guerra Mundial y, para que las alarmas no saltaran entre la población y no dar muestras de debilidad al enemigo, una férrea censura consiguió eliminar casi toda la información en los países contendientes.

En España, país neutral, no existió esta censura, y la mayoría de la población europea conoció los estragos que provocó por noticias de este país. De ahí su nombre.

Hospital de campaña durante la gripe española

Actualmente no se sabe cuáles fueron los orígenes de la pandemia. Hay quien sitúa el nacimiento del virus, hipotéticamente, en Francia o China, en 1916 o 1917. Lo cierto es que el que parece ser el primer caso se encuentra documentado en EE. UU., el 4 de marzo de 1918, en Fort Riley, una base militar.

A diferencia de otros virus que se ceban con los niños o ancianos, la gripe española causó una mortalidad enorme entre la población de entre 20 y 40 años, la más resistente. Solía provocar el fallecimiento en unos cinco días por hemorragia o edema pulmonar.

Se calcula que mató entre 50 y 100 millones de personas en todo el mundo desde 1918 a 1920, entre un 3% y un 6% de la población mundial. Esto convierte a la gripe española en la más letal de la historia.

La mejora de las comunicaciones y la velocidad en los desplazamientos de las tropas favorecieron enormemente la expansión de la enfermedad por Europa. Por eso, si bien no se puede decir que la guerra fuera la causante del virus, sí fue uno de sus mejores aliados en su propagación.

Los primeros infectados en Europa se registraron en Francia, desde donde la gripe pasó rápidamente a España. Este país fue uno de los más afectados, con 8 millones de infectados, de los que 200 000 murieron (el 1% de la población por aquel entonces).

En el resto de Europa se consideran las siguientes cifras: Reino Unido, 250 000 muertes; Francia, 400 000; y, en Italia, similar al número francés.

Después de tantas muertes, afectar a todo el planeta e infectar a cientos de millones de personas, el virus desapareció en el verano de 1920 y nunca volvió con tanta fuerza.

Podcast sobre las grandes epidemias:

Todas las grandes epidemias de la historia las ha ido recogiendo Bernardo Ríos a lo largo de las pasadas semanas en el blog. Las ponemos todas juntas para abordarlas en un nuevo podcast de Geografía Infinita que puedes escuchar a continuación:

Podcast de las grandes epidemias en Youtube:

Podcast de las grandes epidemias en Ivoox:

Podcast de las grandes epidemias en Spotify:

Sobre el autor

2 comentarios en “Las grandes epidemias de la historia”

  1. Es interesante vet como las pademias y las historias se repiten. No necesarimente de forma cíclica, pero con elementos esenciales parecidos, como las gormas de propagación. Sin embargo, el que cada país trate, forma individual, encontrar una cura o un remedio, ha permitido, que la propagación fuera rápida e intensa.

    La historia, de cada evento, nos dice claramente que la unión de esfuerzos puede llevar a una solución rápido, sin la necesidad de sacrificar tantas vidas.

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